jueves, 5 de junio de 2008

LLOVÍA, LLUEVE,....¿LLOVERÁ?


La lluvia…,no es un mal tema dadas las recientes experiencias que hemos tenido incluso en esta seca Región de Murcia, desde donde escribo. A lo mejor parece algo insustancial para un blog, pero ya dije hace tiempo que los blog son para hablar, y yo quiero hablar desde el mío, pensando.

Siempre se ha dicho que ver caer el agua en una tarde lluviosa es, cuanto menos, un acto de sentimientos encontrados, entre la melancolía y la introspección o ensimismamiento. ¿Quién no ha sido capturado por ese efecto cuando se ha puesto a ver caer la lluvia? ¿Quién no ha sentido una paz y emoción extrañas en una de esas tardes lluviosas? ¿Quién, en esos días de lluvia fina no ha terminado de subir su persiana cuando el sucio blanco de la humedad se ha esparcido cual humo por su cuarto?.
Más allá de los sentimientos, uno recuerda tiempos ya pasados, de lluvia reiterada días tras día, como aquellos que vivimos de cuando aquí sí llovía, de cuando uno era un niño e iba feliz metido en sus botas de agua y su impermeable; cuando las dos terceras partes del paisaje estaban sumergidas en una bruma cavernosa durante días... En la distancia, dominaban oscuras las nubes, y al rato, las gotas repicaban duro sobre los adoquines o las aceras. Los canalones parecían entonces llevar piedras y la película húmeda de la lluvia, que desviaba el viento, iba azotando las ventanas, de cuyos cristales se desprendían regueros acuosos formando hilos de ríos verticales que caían lentamente hacia el borde de la ventana.
Ahora, de las nubes que cruzan un cielo de “hojalata” como digo en uno de mis poemas, caen gotas sin avisar; desprendidas, desarraigadas, con un ansia de difícil comprensión, resbalan por la ventana, tocan las baldosas que pisaremos y se precipitan junto a tantas otras hacia un mar homérico que las volverá a lanzar al cielo, no sin antes haber provocado todo un simulacro de vida, de muerte, y por qué no, de resurrección.

La lluvia….Unas veces me lleva a una infancia casi olvidada, otras a una adolescencia imberbe, otras a una juventud de compromiso,…y ahora al blog ¿quién me lo iba a decir hace sólo una década?

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Me parece una propuesta interesante y valiente la que haces en tu blog. Opinar sinceramentesobre temas que te interesan o conmueven , y hacerlo desde un prisma poético,es algo inusual en la blogsfera, y en general, en la vida.

Ánimo y un abrazo

Alvaro dijo...

Somos casi vecinos, ya que trabajo en blanca, además ayer tuve que ir al Museo Siyasa por el Memorial Mariano Rojas, os ea que me alegro que entrara en mi blog alguien de Cieza.
Saludos y te seguiré

angel almela dijo...

Gracias a Alvaro y a Anónimo por entrar en mi blog.
Tus palabras, Anónimo, me hacen sentir que esto de la bitácora es además de todo lo demás, un medio de expresión de dentro a afuera, algo más que tecnología, evidentemente.Seguiré con mi propuesta, es lo que me gusta.
Alvaro, espero "vernos" más en este mundo blogférico.
Pondré tu enlace en mi blog....también pondría el de Anónimo, pero no sé quién eres.
Gracias a los dos, de verdad.
ANGEL

Anónimo dijo...

"..¿quién me lo iba a decir hace sólo una década?." Antes recuerdo que decíamos algo así como "...si mi abuela levantara la cabeza..." Ahora ya resulta complicado explicar, por ejemplo a nuestros padres, lo que es un blog; y también ahora resulta difícil seguir a nuestros hijos. Esta es una realidad que se impone a gran velocidad. En este contexto blogs como este son necesarios e imprescindibles como ventana personal que proyecta al mundo una perspectiva personal significativa y imagen positiva de Cieza

angel almela dijo...

Es verdad que nuestros hijos nos superan en esto de la informática, son esa generación Einstein o Me que nació con los elementos informáticos. Nosotros, para no perder las raices (no añorándolas), les hablamos de calles sin asfaltar, de carros en las calles, de la Fuenmte del Ojo,....y parece que les estuvièramos hablando del tiempo de Napoleón.
Gracias Conrado por tu opinión. Espero que sigas este humilde blog y que participes en él cuando te apetezca.
Un abrazo.