miércoles, 24 de junio de 2015

RESEÑA EN LA REVISTA LITERARIA BARQUIANA, DE MIAMI


Con motivo de la entrega del XIX Premio de Poesía Aurelio Guirao al poeta Jesús Cánovas, excelente poeta y amigo, este me requirió para hacer una reseña de su poemario ganador, "Otra vez la luz, palomas", para una Revista hispanoamericana, cosa que hice muy gustosamente.
El hecho es que hace unos días, me informó el propio Jesús de que mi reseña había salido en la Revista Literaria Barquiana, editada en Miami, y me daba el enlace para verla.
Quiero compartir este hecho con vosotros, y por eso adjunto mi texto y en enlace a la citada revista por si alguien quiere leerla allí.
(http://www.baquiana.com/Numero_XCV_XCVI/Rese%C3%B1a_I.htm)


El libro Otra vez la luz, palomas del poeta afincado en Murcia y originario de Hellín (Albacete), Jesús Cánovas, con el que ha ganado el XIX Premio nacional de Poesía Aurelio Guirao 2015, es un libro que recoge la madurez de un poeta que llega a ese momento en el que el verso se hace placidez dentro de la emoción sosegada y entra en una especie de señorío de estabilidad madura, y eso, se nota.
Dice el autor en su introducción que el tema de su poemario es el desconsuelo y la tristeza pero con un anhelo de esperanza, y sin querer desdecir al poeta, considero que para mí es sobre todo un poemario de compromiso con el hombre y su conflicto existencial. Ya desde el inicio Jesús elige unos versos de Altolaguirre que imponen un punto existencial al relato poético que por otra lado  forma parte del propio corpus del poeta en otros libros: “Yo soy aquel de quien hablo./¿Desde dónde me contemplo”  Jesús, el poeta, se convierte en personaje, en actor del poema y realiza un monólogo  interior dramatizado desde su propia voz que trasciende al lector, y su pregunta no es más que una búsqueda de su misma voz. Al hacerlo, Jesús se convierte en parte del nosotros, porque su voz, escrita en sus versos, forma parte de las emociones que a todos nos conmueven, y por ende a los conflictos que a todos nos atañen.
Otro aspecto fundamental en su poemario es la infancia, paraíso perdido, lugar donde la inocencia hace confluir a todos los conflictos en un estado de no-conflicto, que en Otra vez la luz, palomas se convierte en esperanza, una  puerta de salida del poeta donde poder escapar de su conflicto personal generador de versos tristes y de desconsuelo.
Partir del inconsciente colectivo, que en este caso es la individualidad del poeta, para llegar al lector, es siempre un reto para cualquiera que se acerque a la creación poética, y considero que tras la lectura de este poemario, uno se siente  identificado con los versos, con el conflicto y su emoción, y eso es para mí un éxito de Jesús Cánovas y su libro.
Decía García Montero que la poesía es un modo de ajustar las cuentas con la realidad, y creo que la poesía de Otra vez la luz, palomas responde a esta afirmación pues tras la tristeza y la esperanza que existe en sus versos, hay un ajuste del poeta con aquello que generó el relato poético del libro. Un ajuste que, a través de una estética de la emoción, planifica un resultado donde la infancia, las palomas que vuelven con la infancia, resuelven un crucigrama existencia que se nota humano, y que emociona.
Ha sido para nosotros, desde la colección Acanto que empezamos en 2009 y que lleva ya quince números, una satisfacción haber publicado este poemario ganador de un premio que lleva el nombre de uno de los nuestros, el poeta fallecido en 1996, Aurelio Guirao, poeta que al que llegó a conocer Jesús, al que respetó y quiso, y al que años más tarde llegó incluso a homenajear en su otra ciudad murciana, Águilas. 

lunes, 15 de junio de 2015

50 AÑOS DE "YESTERDAY"


"Todo comenzó una mañana en mayo de 1965. A Paul McCartney se le había pegado una melodía en la cabeza durante un sueño y no conseguía quitársela. Lo que parecía un juego de su mente llegó a convertirse en una de las melodías más reconocibles de la historia del pop en manos de The Beatles. Según sus propias palabras, era como una vieja melodía de jazz, como las que solía cantar su padre y que le hacía volver a su pasado.

La canción, finalmente, se grabó el 14 de junio de 1965. Después de una toma con John Lennon en el órgano Hammond, el productor George Martin sugerió a McCartney usar un cuarteto de cuerda. McCartney se resistió en un principio y dijo: “No quiero ser un Mantovani –en referencia al compositor de música ligera italiano, que solía tocar en aquella época en auditorios de Londres-“. Pero sin esos arreglos la canción no hubiese sido la misma."
(FERNANDO NAVARRO, El País)

domingo, 7 de junio de 2015

LO QUE PASA ES QUE LA CIUDADANÍA EN ESTE PAÍS TIENE MUCHO AGUANTE...



«A pesar de que muchas veces desde la élite se piensa que la ciudadanía no se entera de nada, no es verdad. Ha llegado un punto en el que ustedes se enteran de mucho y a la vez se quieren enterar de más. Lo que pasa es que la ciudadanía en este país tiene mucho aguante, mucho aguante, pero hay un gota a gota, un gota a gota que va cayendo, gota a gota, gota a gota y claro, tanto gota a gota, al final se hace una marea».Discurso de Jordi Évole recibiendo el Premio José Couso 2015.
Posted by Spanish Revolution on Jueves, 4 de junio de 2015
«A pesar de que muchas veces desde la élite se piensa que la ciudadanía no se entera de nada, no es verdad. Ha llegado un punto en el que ustedes se enteran de mucho y a la vez se quieren enterar de más. Lo que pasa es que la ciudadanía en este país tiene mucho aguante, mucho aguante, pero hay un gota a gota, un gota a gota que va cayendo, gota a gota, gota a gota y claro, tanto gota a gota, al final se hace una marea» (J. Évole)

Para reflexionar, y ejercer nuestra ciudadanía sin miedo.





miércoles, 3 de junio de 2015

LLÁMAME POESÍA


Hace un año más o menos, un amigo, periodista y escritor, Antonio Arco, escribió un artículo para ABABOL, bajo el título de "Llámame Poesía", donde hacía un recorrido sobre la poesía murciana con nombres y obras, dejando de manifiesto un esplendor que no todos conocen y valoran. 
En ese artículo me citaba a mí y a una de mis obras, y hoy quiero poneros ese párrafo como homenaje a este amigo que sabe que lo admiro y estimo.

Diluvio

Siempre hay un buen motivo para leer. Versos cortos, largos, deseosos de paz o de que de una vez por toda llegue otro Diluvio Universal. Versos que, como indica el autor de 'Ártico', te ayuden a «desear, acariciar, desaparecer». Versos como los de Andrés Carrillo/Andrés de la Orden, resguardados del olvido en 'Metal Negro', el poemario en el que, según Mari Cruz Agüera, «es imposible adentrarse y salir ileso sin que nos quede una pequeña cicatriz, la misma que nos deja la vida cuando nos atrevemos a mirarla de frente». Hay un poema de 'Metal Negro' en el que está lloviendo sobre Eivissa, un lugar perfecto para pedirle consuelo al Faro del Fin de Mundo. «Vine aquí», escribe su autor, «a confundirme con mi pasado, / pudo mirar alrededor y todo yo soy un cementerio, / llueve, cae el tiempo en zarpas mojadas de dolor, / llueve en Eivissa». Un lugar en el que, de estar allí el poeta Ángel Almela (Cieza, 1955), del activo Grupo de Literatura 'La Sierpe y el Laúd', cuya labor cultural y editorial es admirable, diría, mirando al centro de la tierra: 'Al otro lado, yo' [título de uno de sus poemarios]. Al otro lado, en combate placentero con la poesía, están nombres como el de Javier Orrico, Antonio Parra, Antonio Marín Albalate, Pascual García, Ginés Aniorte, Ángel Paniagua, Javier Moreno, Antonio Durá, el 'maestro' Francisco Sánchez Bautista, Vicente Cervera, Javier Marín Ceballos, Juana J. Marín Saura, Isabelle García Molina, Alberto Chessa, José Belmonte Serrano -crítico literario de 'La Verdad', de quien está a punto de editarse 'Se está haciendo de noche' (Huerga & Fierro), con prólogo de Julio Llamazares; e incluso, el de Carlos Tarque (Santiago de Chile, 1969), autor de 'Sótanos, tierra y montañas rusas', el primer poemario escrito por el músico y compositor, estrechamente vinculado a Murcia desde su infancia, y voz todopoderosa de M-Clan.

Llámame Poesía. Adelante. Cristina Morano, nacida en 1967, poeta que seduce sin adornos, franca y fuerte, les regala hoy el último de sus poemas escritos, vivo bajo la losa de una realidad áspera, ácida, peligrosa. Se titula 'Empleabilidad'. Léalo, si quiere: «Mejora tu empleabilidad, / me dice mi tutor en el INEM, / si no sabes usar internet / te enseñaremos, es más fácil / encontrar una oferta por las redes /sociales virtuales. / ¿Has entendido lo que digo? / Pareces un poquito… triste».