Hoy quiero recordar que hace 31 años, un día como hoy, asesinaron a un artista, un músico que ayudó con su arte al Hombre en su devenir por esta vida que nos lleva cada día hacia un final que, aún previsible, no deja por ello de ser un momento hermoso....John Lennon.
Alguien que a mi generación le dió unas gafas nuevas desde donde mirar el acontecer y la realidad, que por supuesto no era aquella que la dictadura de entonces nos señalaba como única, trascendental y rancia, y que años después ha seguido iluminando a muchas generaciones porque su arte, y lo que con él quiso manifestar, traspasa el límite del tiempo y lo trasciende.
En día aquel, con mi "arma de subversión masiva", mi humilde lápiz, escribí algunos versos improvisados que hoy, 31 años después, releo y copio a continuación.
El instante se ha callado
más los laureles conservan el frescor.
La memoria resiste el embite del silencio
y el grito abre paso al vacio.
El hombre, postrado, se queda solo,
el crepúsculo de la tarde se abalanza
y vuelve los ojos al corazón
para romper tu canto con vehemencia.
Nos has dejado entre el afilado recuerdo,
y la prisión de la mañana.
Y como recuerdo, esta canción, su letra y otras imagénes de Su vida:
jueves, 8 de diciembre de 2011
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6 comentarios:
Gracias por recordármelo, hermano.
No tiene importancia, pero el crepúsculo en caso de abalanzarse lo haría así, con "b".
Por otro lado, emotivo poema. No obstante, en mi humilde opinión de anónimo, tus versos han mejorado con los años (circunstancia que no se da siempre en los poetas), como demuestra tu hermoso libro Al otro lado, Yo.
Gracias, Ángel, por acercarnos a este autor y estos versos.
Gracias a todos, también a la "b".
Gracias, Ángel. Espero no haber sido demasiado quisquilloso.
(El anónimo de la "b").
Gracias Ángel por rescatar el poema y por la canción. este es el poder de la literatura: volver a emocionar con las mismas palabras 31 años después.
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