sábado, 4 de junio de 2011

PIEDRAS... COMO VIDAS


(Sin título, de Ana Almela)
Encontré el otro día un poemario que escribí en el año 1980 (Pensamientos y Paisajes -Detrás de la verdad-), y gocé como un niño con un juguete nuevo leyendo aquellos poemas que hace tanto tiempo escribí.
Uno se reencuentra siempre consigo mismo en su escritura, y aunque la experiencia y la vida nos van cambiando la poética, siempre es gratificante ver cómo escribíamos los versos en otro tiempo porque al final, no hay que olvidarlo, lo escrito es siempre un trozo de uno mismo.
De aquel poemario, rescato este soneto que habla de las Piedras....como vidas:

A costa de oprimir a la ternura,
piedras calcinadas por el olvido,
vamos perdiendo historias y partido
a la mítica ley de la aventura.

En ellas se esconce la hermosura
de la que nacemos. Es el ruido
que despierta nuestro pobre sentido
despuntando siempre la locura.

Y aquel que nos llama y alimenta
con su aura silenciosa y entretejida,
nos aproxima a su vida esperpenta

optando a posicionar su vida
en un reclamo de razón incruenta
que penetra a través de su herida.

4 comentarios:

Marcelino Menéndez González dijo...

Estimado Angel.En efecto es una sensación el vestir el presente con recuerdos y sobre todo poéticos, como
un nuevo y renovado encuentro con la
poesía propia. No creí que muchos pudieran expresar este pensamiento
y esta experiencia tan singular y
tan reconfortante, la he sentido
alguna vez y de ahí que conmparto tu sentir. Con mi afecto MARCELINO

Joaquín Salmerón Juan dijo...

Precioso poema y precioso cuadro, Ángel

Perlita dijo...

Un soneto precioso, Ángel. Cargado de sensibilidad. Siempre digo que los sonetos son muy bellos y de difícil composición. Un arte.
Pienso que si sacases tiempo para visitar a otros blogguers, te darías a conocer mucho más porque es una pena que poemas como estos queden en el olvido.
Perdona si me atrevo a aconsejar.
Un abrazo, Carmen

angel almela dijo...

Gracias Marcelino, tú siempre tan amable e intuitivo, como poeta que eres.
Gracias Joaquín, porque el que mi soneto te parezca al menos tan precioos como el cuadro de Ana, es para mi una satisfacción.
Gracias Carmen,¡y atrévete a aconsejarme!, te lo agradezco de veras.Me encanta que pieses así de un poema que escribí hace ya tanto...Y sí, el Tiempo, ya sabes que SOMOS EL TIEMPO, y en esto no puedo doblegarme más de lo que lo hago, pero me gustarìa navegar por otros Blogs, y a veces lo hago, pero nunca lo suficiente. Un abrazo.