El lunes pasado presentamos en Cieza, mi último poemario, Muro de Carga, editado por La Fea Burguesía, en un acto entrañable y emotivo que tuvo, en su desarrollo y en la asistencia del público, un gran eco (al final os paso algunas fotografías del mismo).
Quiero agradecer otra vez al publico asistente su calor y compromiso conmigo y con la Poesía; a la editorial, con Fernando Fernández Villa a la cabeza, su generosa apuesta por mi libro, y al escritor Paco López Mengual su presentación con palabras muy amables para con mi persona y mi poesía. También, y como no, al grupo musical Tovarich, a Celia y Jero, su aportación musical al acto que no hizo sino embellecerlo. En una tarde desapacible como fue la del lunes pasado, creo que tuvimos dentro del Aula de Cultura de la Fundación Cajamurcia de Cieza, el calor suficiente que nos hizo vivir un momento cultural único. Gracias.
Ahora MURO DE CARGA empieza su andadura que espero que sea larga (ya tengo contactos para presentarlo en otras ciudades) y que llegue a provocar emociones o al menos a interpelar con sentido a sus lectores, porque sólo habrá hecho poético si las palabras de mis versos habitan en los ojos y en el corazón de los lectores.
Como dije en la presentación y repetí en varios medios de comunicación que me entrevistaron, Muro de Carga es un homenaje a la vida, a todo lo que abarca la vida: los deseos, la felicidad, el amor, la tristeza, el tiempo, la verdad, los viajes, la amistad,..., desde mi universo personal y queriendo que trascienda al común.
Este poemario está dedicado a "algo" que ha ocurrido desde que publiqué mi anterior libro de poema: el nacimiento de mis nietos, y a ellos ( Ana, Oriol, María y Berta), se lo dedico. Ellos han llegado como agua fresca al prado de mis años y de mi vasta memoria.
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