Descubrí a Saramago a través de sus novelas, luego, de sus artículos. Con sus novelas gocé siempre de momentos extraordinarios ...El Evangelio según Jesucristo, Ensayo sobre la ceguera, Todos los nombres, La Caverna y sobre todo, Las intermitencias de la muerte, que para mí, además de una estupenda novela, una de las novelas con un mejor final de toda la Literatura universal.
Era ateo, más su "evangelio" estaba formado por ideas lúcidas y llenas de verdad, algunas como:
"Soy una mano obediente que intenta no hacer nada en contra de la lógica y de lo que estoy escribiendo. Que acepta lo que quiere la propia historia. La ironía es una constante en todos mis libros."
"Sinceramente, creo que la muerte es la inventora de Dios. Si fuéramos inmortales no tendríamos ningún motivo para inventar un Dios. Para qué. Nunca lo conoceríamos."
"Creo que en la sociedad actual nos falta filosofía. Filosofía como espacio, lugar, método de reflexión, que puede no tener un objetivo concreto, como la ciencia, que avanza para satisfacer objetivos. Nos falta reflexión, pensar, necesitamos el trabajo de pensar, y me parece que, sin ideas, no vamos a ninguna parte."
"Las miserias del mundo están ahí, y sólo hay dos modos de reaccionar ante ellas: o entender que uno no tiene la culpa y por tanto encogerse de hombros y decir que no está en sus manos remediarlo —y esto es cierto—, o bien asumir que, aun cuando no está en nuestras manos resolverlo, hay que comportarnos como si así lo fuera."
Se van los Maestros,...quedamos más huérfanos.
Un abrazo Maestro...
Descanse en Paz.