Querido Amig@:
Ando estos días entre
la indignación (ya mostrada en la anterior carta) y el cabreo por un tema
profesional al quedarme a menos de tres décimas de obtener una plaza de docente
en el exterior, en Suiza concretamente, como profesor de español; pero ahí
andamos, entre el calor, las lecturas que me esperan cada día y que absorbo
ansioso, mis tareas veraniegas y conllevando estas sensaciones encontradas.
Perdona por ello si esta carta es algo extensa, te juro que no lo pretendía.
Así voy amig@ cuando hace
unos días estuve charlando con unos amigos hasta la madrugada sobre temas de
índole cultural y recordé que el verano pasado publicamos en el periódico semanal
El Mirador un artículo que hacía
referencia al patrimonio cultural (en este caso el referido a la Literatura), que
constituye la obra y el conjunto de autores y artistas que desarrollaron y/o
desarrollan su quehacer artístico en su ciudad, en este caso lo hacíamos de
Cieza (Murcia), lugar donde resido. Y comentábamos que, el conocimiento, su
estudio y apoyo, son acciones necesarias para preservar todo ese acervo
cultural que forma parte de la historia de una ciudad…Mala cosa ahora con lo
que nos trae la crisis.
Recuerdo que hace más
de 30 años (año 1981), el Grupo de Literatura La Sierpe y el Laúd publicó un
libro, “Diez Autores Ciezanos”
en el que entraba yo mismo y otros nueve autores (Mª Pilar López, Angel
Almela, José Piñera, Jesús A. Salmerón, Aurelio Guirao, Francisco Pino, Joaquín
Gómez Carrillo, Carmen Carrillo, Pascual Lucas y Antonio Guirao), recogiendo
una pequeña muestra literaria de todos
ellos, siendo aquella la primera ocasión conocida de recopilación de escritores
de aquí, desperdigados y con poca divulgación la mayoría de ellos. Fue aquel un
libro histórico pues era un acercamiento al conocimiento literario de los
creadores ciezanos para que trascendiera a otros ámbitos y de paso ofrecer al
resto de la población una información de
interés de una parte del patrimonio cultural de todos, a tenerse en cuenta.
En el año 2008,
veintidós años después, La Sierpe y el Laúd lanzó otro libro de parecidas
características, “DIEZ más DIEZ” en el que estaban los diez autores de aquel
libro de 1981, más otros diez nuevos autores también de Cieza (Manuel Dato,
Isabel Mascuñán, Mª Carmen Ruiz, Antonio Ortega, Eduardo López, Antonio Gómez,
Concha Ruiz, Pascual López Sánchez, Mª Carmen Rodríguez y Antonio F. Muñoz)
que completaban un libro esta vez casi antológico de autores de aquí. Si a
todos esos autores añadiéramos los de Juan
A. Piñera, Miguel Angel Ortega, Rosa Campos, Bartolomé Marcos, Antonio F.
Marín, Alfredo Marín, Daniel J. Rodríguez o José Luis Tudela, podríamos
concluir que el retrato general de este aspecto del patrimonio cultural
ciezano, el de la Literatura, es suficientemente amplio e interesante como para
tomarse en serio este hecho. Si a aquellos escritores uniéramos los nombres de
reconocido prestigio como fueron los de Antonio Pérez Gómez o Fernando
Martín Iniesta, o los de Capdevilla
o Salmerón, podríamos decir que todo este grupo de autores constituyen una
realidad cultural incuestionable y además poco repetible en el ámbito municipal,
tanto de Murcia como del resto del País.
¿Es merecedor de
estudio, atención y ayuda, por parte de las autoridades locales, esta riqueza
del Patrimonio Literario de esta ciudad? En otras localidades como por ejemplo
Molina de Segura, con algo parecido a lo que aquí existe, sí se apoya y hoy en
día constituye un foco de atención literaria importante; o ahí está el caso de
Blanca, que se autodenomina Villa del
Libro, y que sin tener entre sus habitantes ni la décima parte de los
escritores que aquí hay, existe un apoyo a la Literatura fuera de dudas.
Pues me gustaría, aprovechando
esta veraniega carta, querido amig@, reivindicar y solicitar (si hay alguien
que me escuche), el apoyo de nuestras autoridades locales, a pesar de la
crisis, para que hagan algo al respecto pues considero que este ámbito cultural
debería ser conocido por todos nuestros paisanos y por el resto de la Región,
pues constituye un patrimonio cultural digno de trascender y de cuidar, fuera
de otras manifestaciones que sí se apoyan institucionalmente, y que son de una
más que dudosa significación cultural.
Querido amig@, creo que
si vamos “inventando” sin reflexión (hoy es el Rocío, otro día es el Hueso de
Oliva, otro El Escudo, etc.), si confundimos “Fiesta” con “Cultura” y no se potencia
lo que tiene detrás una historia y significación importante, perdemos
referentes, perdemos eso que cuesta tanto, la Identidad, y nos convertimos en
una amorfa ciudad que no la reconoce “ni la madre que la parió”.
¿Cuántos de nuestros
paisanos sabe quién era Aurelio Guirao o Mª Pilar López, por decir dos de nuestros
más importantes escritores ya desaparecidos, además habiendo en Cieza dos
lugares que llevan sus nombres, un Auditorio y una Plaza?
La Literatura local,
sus escritores y sus obras publicadas, constituyen un importante acervo
cultural y son parte del patrimonio de nuestra ciudad, creo que algo digno de
conocer, estudiar y apoyar.
Mientras, sigo
indignado y cabreado, pero libre y pensando sobre las cosas que ocurren.
Lo dicho, que seas
feliz querido amig@.
Hasta la próxima.
4 comentarios:
Y no dejes de hacerlo.
las minorias ya se sabe....
vera usted en el macro botellon (entiendase lanzamiento de huesos) la gente que hay y la atencion que a elloprestan los gobernantes....
A un poeta menor de la antología
¿Dónde está la memoria de los días
que fueron tuyos en la tierra, y tejieron
dicha y dolor y fueron para ti el universo?
El río numerable de los años
los ha perdido; eres una palabra en un índice.
Dieron a otros gloria interminable los dioses,
inscripciones y exergos y monumentos y puntuales historiadores;
de ti sólo sabemos, oscuro amigo,
que oíste al ruiseñor, una tarde.
Entre los asfodelos de la sombra, tu vana sombra
pensará que los dioses han sido avaros.
Pero los días son una red de triviales miserias,
¿y habrá suerte mejor que ser la ceniza,
de que está hecho el olvido?
Sobre otros arrojaron los dioses
la inexorable luz de la gloria, que mira las entrañas y enumera las grietas,
de la gloria, que acaba por ajar la rosa que venera;
contigo fueron más piadosos, hermano.
En el éxtasis de un atardecer que no será una noche,
oyes la voz del ruiseñor de Teócrito.
JORGE LUIS BORGES
Querdio Anónimo, lo malo de los macros botellones/Hueso de Oliva no es que les presten atención o no, sino que los medios que se la prestan lo disfracen de Cultura y los ensalcen fuera de lo que realmente son, una excusa para llevar a cabo un gran botellón dentro de una Feria y fiestas cada vez más devaluada.
Respecto al poema que nos pones, "chapeau".
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